RESUMEN
Paulino Córdoba, Gabino Roura, Rodolfo Huerta y Matías Quiroga, han sido amigos desde la infancia, pero de adultos, sus prioridades cambiaron, y un pecado amenza con destruir su relación de amistad.
Paulino es dueño de la Hacienda «El Milagro» productora de manzanas, y esposo de Rosario, tienen dos hijos, César y Lucrecia. Rosario siempre ha mostrado predilección por el varón y un abierto rechazo contra su hija. A Lucrecia la cuidó Delfina, sirvienta de Rosario y madre de Manuel.
Lucrecia y Manuel se consideran hermanos de leche, porque Delfina los amamantó. El mejor amigo de Lucrecia es Julián Huerta. Ambos comparten los mismos gustos y una sensibilidad que fragua, al paso de los años, en un gran amor.
Gabino Roura es un hombre astuto y ambicioso que mata a su esposa Inés, para apoderarse de su fortuna. Gabino manipula a sus amigos y sus hijos, Carmelo y Teresa. Es el dueño de las mejores tierras de cultivo, que renta a Paulino, para controlar la distribución y comercialización de las manzanas.
Rodolfo es el maestro del pueblo de San Pedro, es un hombre íntegro y trabajador. Está casado con Justina, una sensual mujer que vive insatisfecha por lo poco que le da su marido. Son los padres de Julián y Josu黦 Justina Almada, la mujer de Rodolfo, es quien detona conflictos graves que amenazan con destruir la relación de amistad de Rodolfo, Paulino y Gabino.
Matías Quiroga, sacerdote del pueblo, ven con angustia como sus amigos ahora son enemigos y el principal obstáculo para el amor de Lucrecia y Julián. Para desgracia de ambos, el azar hace que se vean involucrados en un accidente que costó la vida a César. Y, aunque son inocentes, Rosario piensa que son los responsables.
La depresión se apodera de Rosario quien no soporta la presencia de su hija. El resentimiento de Rosario obliga a Paulino a alejar a su hija de «El Milagro» y a distanciarse de la familia de Rodolfo Huerta. A partir de entonces la mala fama de Julián corre por el pueblo y de allí surge el apodo de «El Chamuco», que tendrá que cargar el resto de su vida.
Al paso de los años, Julián y Lucrecia se reencuentran y su amor renace, pero sus padres se oponen, ellos están dispuestos a luchar por su amor. Y cuentan con el apoyo de Delfina, Modesto, su esposo, y la solidaridad de Manuel quien, a pesar de amar a Lucrecia, los ayuda a ser felices. Modesto, capataz de «El Milagro», es un hombre de campo, que tiene una parcelita de maíz y que junto con Delfina y Manuel forman una familia integrada y amorosa.
Lucrecia no regresa sola, la acompaña Renata, su prima. Una muchacha envidiosa dispuesta a apoderarse de todo lo que es de Lucrecia. Paulino sufre una crisis económica y Gabino le exige casarse con Lucrecia. Pero Carmelo se interpone y mata a su padre. Julián es acusado injustamente de ese crimen, por lo que Lucrecia se ve obligada a casarse con Carmelo para evitar la ruina de su padre, y que Julián sea acusado injustamente. Julián se va del pueblo, convencido de que Lucrecia lo abandonó.
Lucrecia vive sumida en la tristeza como esposa de Carmelo, además de que ha perdido la hacienda «El Milagro». El pueblo habla de la llegada de un extraño que compró «El Milagro». Lucrecia descubre que el extraño es Julián Huerta»¦ Carmelo se entera que Julián ha regresado y se desata la guerra entre ambos por el amor de Lucrecia.
Fuente: esmas
NUESTROS COMENTARIOS
«Zapatero, a tus zapatos». Mi pecado es una telenovela mexicana al 100%, escrita por escritores mexicanos de gran trayectoria para el público mexicano. No es una adaptación de un éxito colombiano ni argentino. Nada en contra ni a favor de las telenovelas de ningún país. Simplemente que cada país las hace diferentes (ni peor ni mejor) y yo cuando quiero ver una telenovela colombiana, veo una telenovela colombiana y cuando me siento a ver algo de México (Televisa o Azteca, me da igual) quiero ver algo mexicano. Claro está que cada quien tiene sus gustos y la telenovela mexicana no le puede gustar a todo el mundo, ni la colombiana o la argentina, por ejemplo, tampoco.
Mi pecado es una historia original de Cuauhtémoc Blanco, María del Carmen Peña y Victor Manuel Medina. Blanco y Peña también son responsables de Ángela, Capricho, Cadenas de amargura, El manantial o Cañaveral de pasiones con las cuales tiene varios elementos en común.
El gran sorpresa de Mi pecado es la revelación en los capítulos finales de la razón por la que Rosario no quiere a su hija Lucrecia. Créanme que es una razón de peso y no una excusa cualquiera. Aquí estamos hablando de melodrama con letras mayúsculas.
Mi pecado es una telenovela de pueblo pequeño y hacienda gigante. Una telenovela rica en exteriores en lugares bellísimos. Hay una cautivante historia de amor central entre dos personajes muy atractivos físicamente pero sin caer en salvajitas ni mugrositas de esas que tanto le gustan a mi compi de página Diana (es broma). Lucrecia sí viene de una familia más pudiente que Julián pero lo historia no va, en el fondo, de diferencias sociales aunque en las primeras etapas sí se enfatizan esas diferencias hasta cierto punto.
Y, hablando de etapas, Mi pecado, como Cañaveral de pasiones y otras telenovelas, comienza con una fase en la que los protagonistas son niños. En este caso está más que justificado aunque yo no soy fan de este tipo de inicios porque me suelen aburrir bastante. Lo más destacado de esa primera fase es el que hace la gran Lucía Méndez que se roba cada escena en la que aparece.
Recomendadísima a los fans de las telenovelas mexicanas de verdad, sobre todo, a los que hayan disfrutado con El manantial u otras telenovelas de los mismos autores.
http://youtu.be/LODOOnaqTeY
LO MEJOR
Mi pecado tiene un buen guión del que destaco el ritmo y los giros argumentales a lo largo del mismo. La dirección, edición y musicalización van en sintonía con el guión, lo que la hace una telenovela «bien hecha».
En cuanto al elenco destacaría a Daniela Castro como Rosario porque, aunque al principio me precía sobreactuada, poco a poco me fue ganando hasta que me impactó la revelación sobre el origen del odio a su hija y su final. En la actual telenovela Lo que la vida me robó está utilizando algunos de los gestos y tics de Rosario pero no he visto esa telenovela lo suficiente como para poder juzgar si le funciona bien esa estrategia. Por otro lado, me gustaron Magda Karina como Delfina y Francisco Gattorno como Rodolfo.
Sorprendentemente, Mi pecado es una telenovela con muchas escenas de acción y sobre todo de accidentes automovilísticos que me parecieron muy logrados en general menos uno que comento en la próxima sección.
LO PEOR
Hay un accidente en el que muere un personaje (no diré cuál) que les salió muy mal. Aunque parece un choque leve, el conductor sale disparado por la vidrio de manera poco creíble.
Y, hablando, de accidentes y muertes, Mi pecado se me hizo en ocasiones una telenovela demasiado gráfica en cómo retrata la violencia. En alguna ocasión tuve que desviar la mirada en escenas de peleas entre los personajes. Me sorprende que en México esta novela saliera a las siete de la tarde con estos contenidos. Tampoco quiero exagerar, en Mi pecado lo que predominan son las escenas de amor y de besos que tanto gustan pero sí hay bastante violencia también.
VALORACIÁ€œN: 7
ELENCO
Maite Perroni – Lucrecia Córdoba Pedraza
Eugenio Siller – Julián Huerta Aldama «El Chamuco»
Daniela Castro – Rosario Pedraza de Córdoba
Armando Araiza – Carmelo Roura Valdivia
Lucía Méndez – Inés Valdivia de Roura
Sergio Goyri – Gabino Roura Beltrán
Sabine Moussier – Justina Aldama de Huerta
Roberto Blandón – Paulino Córdoba
Salvador Sánchez – Padre Matías Quiroga
Altair Jarabo – Lorena Mendizabal Molina
Jessica Coach – Renata Valencia
Tina Romero – Asunción Torres «Chona»
Magda Karina – Delfina «Fina» Solís
Ricardo Franco – Miguel Mendizabal Molina
Úrsula Prats – Matilde Molina vda. de Mendizabal
Gilberto de Anda – Fidel Cruz
Antonio Medellín – Modesto Flores
Sergio Reynoso – Ernesto Mendizabal
Dacia Arcaraz – Irene Valenzuela
Rafael Goyri – Simón Méndez
Jackie García – Blanca «Blanquita» Quiroga
Gabriela Carrillo – Teresa «Tere» Roura Valdivia
María Prado – Doña Rita López
Amparo Garrido – Doña Socorro
Diego Amozurrutia – Josué Huerta Aldama
Aldo Gallardo – Manuel Solís
Ana Laura Najot – Toña
Daniela Aedo – Lucrecia Córdoba Pedraza (niña)
Adriano – Julián Huerta Aldama (niño)
Robin Vega – Josué Huerta Aldama (niño)
Alejandro Cervantes – Manuel Solís (niño)
Diego Velásquez – César Córdoba Pedraza
Claudio Báez – Lic. Luciano Ordorica
Laura Carmine – Lola