RESUMEN
Cristina es una muchacha dulce y tierna, querida por todos en «El Platanal», una hermosa hacienda propiedad de Don Severiano Álvarez, su padre, hombre recio de campo y de gran carácter. En este lugar trabaja como capataz Diego Hernández, un criollo fuerte que se ha enamorado Cristina, y ella, ante el amor que siente por Diego, se entrega a él.
Cristina confiesa a su padre estar embarazada y que ama a Diego.
Severiano ordena que Cristina y Raquela, la sirvienta, se vayan a la capital y ahí tenga a la criatura. Por los manejos de Federico Rivero, la pequeña María del Carmen regresa a la hacienda como hija de Raquela. Cristina, por estar cerca de su hija, se ve obligada a casarse con Federico, un hombre despiadado y ambicioso. Y de ahora en adelante ella será para todos su «madrina». Federico provoca un accidente en el que Cristina queda ciega; así, la fortuna de ella pasa a sus manos.
Federico se alegra ante la llegada de su sobrino Carlos Manuel, joven apuesto que ha concluido sus estudios de medicina en el extranjero.
Carlos Manuel se enamora de Déborah Falcón, sin saber que es amante de su tío. Cuando Federico se entera de esta relación, se opone y busca la manera de separar a Déborah de su sobrino. Simultáneamente, María del Carmen se enamora de Carlos Manuel desde el momento en que lo conoce, provocando el odio de Déborah, que junto con Federico, hace todo lo posible por separar a la joven pareja, logrando un distanciamiento entre ellos, pero no pueden lograr que el amor que sienten se apague.
Carlos Manuel consigue que su maestro, amigo y especialista en oftalmología analice el caso de ceguera de Cristina para que lo ayude a operarla. El Dr. Robles se enamora en secreto de ella y tiene un gran interés en que recupere la vista. Federico, deseoso de poseer a María del Carmen a como dé lugar, trata de abusar de la joven, pero Cristina lo impide.
Fuente: esmas.com
NUESTROS COMENTARIOS
La telenovela tiene dos historias dramáticas que podemos diferenciar. Una primera historia seria la de Cristina (Victoria Ruffo) y Diego (Osvaldo Rios) y la segunda como trama «juvenil» por decirlo de alguna forma la hija de Cristina «María del Carmen» (aracely Arambula) y Carlos Manuel (Fernando Colunga).
La primera historia es puro dramón. La historia es original de Caridad Bravo Adams (un clásico de la literatura nacional que han adaptado las telenovelas mexicanas) y libreto de Liliana Abud y quizás sabiendo esto de antemano podríamos entender los giros y regiros que da el guión para castigar a Cristina de su desliz para luego ser perdonada. Cristina (Victoria Ruffo) es una chica decidida con valentía que no le importa enfrentarse a su padre por el amor de Diego (Osvaldo Ríos), casarse con Federico (César Evora), a pesar que tiene su amante vivendo en la casa si todo eso le va a servir poder tener a su hija cerca. Toda la decisión y valentía que aparece en los primeros episodios se desvanece cuando por un accidente (provocado por Federico) Cristina queda ciega, que no muerta pero parece que a partir de entonces lejos de ser más luchadora todavía se vuelve con temores, depresiva para ver a la Ruffo llorar y llorar toda la telenovela… este giro en el guión propio del más clásico culebrón venezolano no sirve para otra cosa que redimir a Crisitna porque ante todo «pecó» y su desliz con Diego debe ser pagado con sufirimiento … aunque sepamos que Cristina al final verá y será perdonada por su hija.
La historia con Diego tenía gancho y hubiera sido más emocionante que el personaje no muriera. Federico, interpretado con una maestría sin igual por César Evora es un villano divertidisimo le gusta cualquier palo con falda y allí va de cabeza. Es un villano injustificable que no entendemos porque tiene que fastidiar a todo el mundo, pero César Evora lo hace tan bién que nos olvidamos de lo terrible y espantoso que llega a ser con todo el mundo. Seguimos en nuestras trece que la historia hubiera sido más factible si Diego no hubiera muerto, lo hubiera dejado vivr en la hacienda trabajando de peón y asi tendríamos un triangulo amoroso clásico pero con sentido.
Pero parece que la telenovela no se hizo para lucimiento de Ruffo, Evora y Rios síno para dar paso a otro elenco más joven que no hay por donde cogerlo y esa es la historia de Maria del Carmen (Aracely Arámbula) y Carlos Manuel (Fernando Colunga).
Para empezar no hay una historia de amor por ningún lado por mucho que nos quieran convencer de ella. Carlos Manuel es sobrino de Federico y ha visto nacer a María del Carmen, siempre la ve de una forma fraternal y cariñosa… suponemos que le lleva 10 – 12 años y para él es de la familia y la trata como tal. Cuando después de un montón de años vuelven a encontrarse porque Carlos Manuel regresa a la hacienda ya recibido de médico el la sigue tratando igual, además el viene comprometido sigue tratándola de la misma forma y se lo dice por activa y por pasiva que la quiere pero no como ella cree.
El comportamiento de Mari Carmen es digno de una cria de quince años que se enamora de su «primo» mayor pero lo lógico es con el tiempo acabes haciendo caso a las personas que te rodean que comparten tus aficiones y gustos y en este caso Maria del Carmen se hubiera tenido que fijar en José María( Pablo Montero), pero no Maria del Carmen que es una tozuda sigue empeñada en que Carlos Manuel se enamore de ella. Al cabo de tres años Carlos Manuel regresa casado, en este segundo reencuentro, los reclamos que le hace ella son de juzgado de guardia, «dizque» que ella siempre lo ha amado y ella es toda una mujer ( tiene 18 años claro … ya sabe todo lo que hay que saber en esta vida …) este comportamiento es digno de cualquiera de las villanas de telenovela mala que no soportamos pero en este caso es la protagonista.
Encima le reclama que haya venido casado, estaría bueno que Carlos Manuel no pudiera hacer lo que le viniera en gana y más hacer caso a una cria de quince que no sabe si va a volver a ver. Aunque el hecho que venga casado es pura falsedad del guión para separar a los jóvenes porque el viene poco convencido con argumentos tan fuertes como » Debora me alcanzó en Europa y me convenció para casarnos»… bueno guapito de cara será que alguien hecho y derecho no sabe enviar a quien no te interesa a paseo. Por cierto porque en las telenovelas vemos muy poco que las parejas se vayan a vivir juntos o lo prueben primero ¿Siempre tienen que casarse?, ¿Será que en Mexico los divorcios son gratis ?…
Seguimos con la escena en la que María del Carmen le reclama a Carlos Manuel que no quiera nada con ella porque es algo que pasará al anal de las peores escenas en las telenovelas. Pero creo que es mejor que lo presencies vosotros mismos. (La escenita esta para el final)
Sólo voy a comentar dos frases «María del Carmen tu pelo huele a limpio, a campo … cuando estoy contigo algo me pasa … » Yo queridos lectores estoy confundida, Carlos Manuel le esta diciendo que no la quiere y ¿es porque le huele el cabello que repentinamnete se enamora de María del Carmen? No era que Cupido lanzaba flechas … ¿Qué champú utilizará Maria del Carmen para que enamoré en un plis a Carlos Manuel?, no quiero saberlo me da pavor. Queridos lectores capítulo 25, suficiente para apagar el televisor y ver que nos toman el pelo.
Como ya hemos dicho aquí no hay historia de amor por ningún lado, por mucho que se empeñen en los 100 capitulos posteriores de que se besen mil veces, y que nos den escenitas «de amor» como la vista. Las formas que tienen para juntar y rejuntarlos no tienen sentido alguno, sobretodo gran secreto y por la preocupación de Carlos Manuel que pueda haberse contangiado de SIDA y por eso en una escena que todo el mundo se imagina que va haber tema el la rechaza por ese problemilla. Por Dios del amor hermoso :
1. Carlos Manuel es médico, en caso que en una operación se hubiera contagiado la primera cosa que haces es ir hacerte una prueba, si estás en el hospitral más fácil me lo pones y los resultados te los dan en un par de horas.
2. Si la idea era aleccionar al personal, ¿para que sirven los preservativos? no es esta la lección que nos vienen dando las sanidades públicas para evitar contagios sexuales y no sólo el SIDA, no mejor dar lecciones morales de abstinencia. No ha lugar.
Nada que no cogemos la novela por ningún lado, y nada de lo que hacen para juntarlos y desjuntarlos tiene sentido, lo de casar a Carlos Manuel, lo del sida, casar a María del Carmen con José Maria. Nada nada de nada. Lo lógico hubiera sido el planteamiento inicial si María del Carmen ama a Carlos Manuel tendría que haber habido un juego de seducción, de conquista por parte de ella para que el poco a poco se hubiera enamorado. Aqui el único que nos creemos que quiere a María del Carmen es Jose María, pero el enamoramiento repentino de Carlos Manuel por María del Carmen es forzado a más no poder.
Para acabar no podemos dejar de hablar de los actores que interpretan a Carlos Manuel y María del Carmen. Aracely Arambula no aprueba por ningún lado … su interpretación de una niña de quince es inaguantable y su interpretación en general forzada y sobreactuada.
Fernando Colunga es un actor irregular no podemos negar que las últimas novelas que ha sido dirigido por Estrada hemos visto a un Colunga diferente, con más registros y que nos ha convencido con sus personajes. Estrada ha sabido sacarle partido, pero no sólo a él a otros actores que estaban anclados en personajes sosos y sin chicha. En este caso Colunga no se le ve una actuación que nos quite el hipo, más bien Carlos Manuel nos parece soso de morirse y que a la segunda cita nos durmamos con su discurso.
LO MEJOR
Pues nos quedamos con César Evora que aunque haga de malo de opereta, sin escrúpulos y malo de morirse lo hace bién .. le queda mucho mejor que los papeles de galán maduro que aún intentan enchufarle de vez en cuando. Salvaremos a la Ruffo, porque en esta novela su papel de magdalena esta justificado aunque el personaje empiece bien para no tener ningun sentido
LO PEOR
Otra producción tétrica de Salvador Mejía, que cuando has visto una las has visto todas porque todas tienen una estética lugubre de morirse y como le gusta trabajar con los mismos actores es fácil confundirse.
Aracely Arámbula sin comentarios.
Los giros del guión para separar a las parejas de la telenovela que no tienen ni gracia ni sentido. Como es habitual en las telenovelas de Mejía, demasiados personajes y tramas secundarias que no nos aportan nada, que a lo mejor bien estudiadas daría para hacer otra telenovela y no tener que meter tanta historia sin sentido en un mismo drama.
En general una telenovela que si alguien tenía duda podeis prescindir de ella sin problemas.
ELENCO
Victoria Ruffo (Cristina)
César Evora (Federico)
Nailea Norvind (Déborah)
Fernando Colunga (Carlos Manuel)
Aracely Arámbula (María del Carmen)
Osvaldo Ríos (Diego)
Alicia Rodríguez (Consuelo)
Arnaldo André (Dr. Robles)
Emilia Guiu (Flora)
Joaquín Cordero (Severiano)
Lilia Aragón (Efigenia)
Rosita Quintana (Eduviges)
René Muñoz (Regino)
Rossana San Juan (Raquela)
Pablo Montero (José María)
Tina Romero (Jacinta)
Miguel Córcega (Padre Ignacio)
Aurora Clavel (Vicenta)
Toño Mauri (Padre Moisés)
René Casados (Francisco José)
Eduardo Noriega (Pancho)
Dacia González (Candelaria)
Mario Casillas (Presidente Municipal)
Toño Infante (Eulogio)
Ignacio Guadalupe (Benito)
Alicia Montoya (Gumersinda)
Verónika (Casilda)
Dacia Arcaraz (Gema)
Jorge de Silva (Abelito)
Esther Rinaldi (Nieves)
Emily Faride (Paquita)
Paco Ibáñez (Juancho)
Sergio Reynoso (Hernán)